Un día perfecto de vacaciones

Un día perfecto de vacaciones

En el Camping Isábena se pueden realizar muchas actividades y no deberían perdérselas por nada del mundo. Este es el transcurso de un típico día de vacaciones aquí:

Durante el verano, cuando de día hace mucho calor, lo único que nos ayuda es saltar al agua fresca de la piscina. También hay días en los que se quiere hacer algo más pero aún así ir por un chapoteo en el agua, en este caso se puede ir a una de las zonas donde es posible bañarse. Mi zona favorita no se encuentra muy lejos del cámping. Saliendo del cámping se gira a la derecha y se sigue la carretera A1605 vía a Graus pasando la entrada para subir a Roda. Luego de unos 250 metros más aproximadamente se encuentra un pequeño estacionamiento al lado izquierdo. Desde aquí se baja caminando por la derecha hasta llegar al puente románico. Ahí se puede disfrutar completamente de la naturaleza: las rocas grandes y planas son perfectas para tomar el sol mientras se escucha el tranquilizante sonido del agua. Aquí un consejo: Quien tenga pies sensibles debería llevar zapatos resistentes al agua, de esta manera se puede caminar sin problemas en el río.

Regresando del río nos espera algo muy emocionante: un vuelo en helicóptero, una de las ofertas más exclusivas del cámping. Mientras el helicóptero es muy bien controlado antes de cada vuelo los nervios suben. Antes de elevarse el corazón está a punto de salirse por la boca hasta que de repente se está en las alturas y se puede ver el cámping y las montañas desde arriba. No tener nada más que aire debajo de sí y ver el paisaje espectacular desde otro punto de vista es una sensación única. Si hace buen tiempo se tiene una vista espectacular sobre los Pirineos. Michael, el piloto e hijo del dueño del cámping Pepe Badía, tiene mucho que contar sobre los pueblos y montañas debido a su buen conocimiento de la zona y si se tiene suerte se puede ver hasta el Aneto con su peculiar cumbre, la montaña más alta de los Pirineos. Apenas se vuelve a estar en tierra firme enseguida se tienen ganas de volver a elevarse.

Cansados por el agitado día en las vacaciones definitivamente también se necesitan descanso y relajación. Vamos a la zona de spa! Aquí primero se puede relajar en el jacuzzi y lo especial es que al mismo tiempo se puede disfrutar de la vista espectacular de las montañas. Para culminar el día recibimos un buen masaje y la relajación está garantizada.

En cuanto baje la temperatura por la tarde es una buena idea visitar el bar y el restaurante. Con una copa de tinto se puede disfrutar de menús que cambian a diario como por ejemplo la paella casera o también la noche de tapas con variadas especialidades españolas. Aquí se reúnen visitantes internacionales y muchas veces se puede conocer gente nueva y muy interesante. Un cierre perfecto para un día perfecto de vacaciones.